A partir de hoy martes 18 de febrero de 2025, las escuelas del Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles (LAUSD) implementarán una nueva política que restringe el uso de teléfonos celulares y dispositivos inteligentes durante el horario escolar. Esta medida, aprobada en junio de 2024 por la Junta de Educación del distrito con una votación de 5-2, tiene como objetivo transformar el entorno educativo al reducir las distracciones y fomentar una mayor atención en las aulas.
El superintendente del distrito, Alberto Carvalho, fundamentó la decisión en investigaciones médicas que vinculan el uso excesivo de teléfonos celulares con niveles elevados de ansiedad y adicción en los estudiantes. «Devolvamos a los niños su infancia. Eliminemos esta adicción generalizada no solo a los teléfonos, sino también a las redes sociales que perpetúan este problema», expresó Carvalho. La política también se alinea con la Ley de Escuelas Libres de Teléfonos de California, promulgada por el gobernador Gavin Newsom en septiembre de 2024, que permite a los distritos escolares implementar restricciones en el uso de dispositivos electrónicos.
La Ley de Escuelas Libres de Teléfonos, conocida como AB 3216, exige que todas las escuelas de California elaboren reglamentos para limitar o prohibir el uso de teléfonos móviles en las aulas para el 1 de julio de 2026. El objetivo principal de esta legislación es mejorar el enfoque académico de los estudiantes y su salud mental, ya que el uso excesivo de teléfonos se ha vinculado a mayores niveles de ansiedad y depresión. La ley permite excepciones en casos de emergencia y ha recibido apoyo bipartidista en la legislatura estatal.
Antes de la implementación de esta ley, varias escuelas y distritos en California ya habían tomado medidas para restringir el uso de teléfonos celulares. Por ejemplo, la escuela secundaria Bullard en Fresno prohibió los teléfonos hace dos años, observando una disminución en el acoso escolar y un aumento en la socialización entre los estudiantes. Sin embargo, el director Armen Torigian señaló que hacer cumplir las restricciones ha sido un desafío, ya que algunos estudiantes intentan eludir las reglas utilizando dispositivos antiguos o manipulando las fundas de seguridad.
A nivel nacional, otros estados como Florida han adoptado medidas similares. En 2023, Florida se convirtió en el primer estado en prohibir los teléfonos celulares durante las clases en las escuelas públicas, además de bloquear el acceso a las redes sociales en las redes Wi-Fi del distrito. Estas iniciativas buscan reducir las distracciones en el aula y abordar los impactos negativos de las redes sociales en la salud mental de los jóvenes.
La implementación de estas políticas ha generado debates entre educadores, padres y estudiantes. Mientras algunos argumentan que las restricciones son necesarias para mejorar el rendimiento académico y la salud mental, otros expresan preocupaciones sobre la capacidad de los estudiantes para comunicarse en situaciones de emergencia y el desafío de hacer cumplir las prohibiciones de manera efectiva. No obstante, la tendencia hacia la limitación del uso de dispositivos móviles en entornos educativos continúa ganando impulso en todo el país.