Cancelaciones de conciertos y visas negadas a artistas del regional mexicano alarman a promotores y fanáticos latinos en EE.UU., bajo la administración Trump.
Visas anuladas y conciertos cancelados: el regional mexicano bajo ataque en EE.UU.
Por BLUJOURNAL | Redacción digital especializada
WASHINGTON / LOS ÁNGELES — La comunidad latina en Estados Unidos está viviendo una nueva preocupación cultural: la cancelación masiva de conciertos y la anulación de visas a artistas del regional mexicano. Bajo el gobierno de Donald Trump, promotores y fanáticos acusan un endurecimiento en los procesos migratorios que impacta directamente en la escena musical latina, afectando eventos ya planificados en ciudades clave como Houston, Chicago, Los Ángeles y Nueva York.
Una ola de cancelaciones que duele
Grupos emblemáticos como Los Tucanes de Tijuana, Grupo Frontera, Fuerza Regida y otros artistas emergentes han visto cómo sus giras por Estados Unidos son interrumpidas debido a la negación de visas de trabajo (tipo O y P). Las razones detrás de estas decisiones, según fuentes cercanas a las oficinas de inmigración, responden a nuevas políticas internas que buscan «verificar con mayor rigor la naturaleza y el impacto cultural del trabajo artístico».
Para promotores como Ramón Castañeda, de RMS Entertainment, el momento actual es “como un puñetazo en el estómago para nuestra música”. “Estamos perdiendo oportunidades, contratos, inversiones, pero lo más grave: estamos privando a la comunidad latina de ver en vivo a quienes cuentan nuestras historias”, lamenta.
La cultura mexicana, bajo presión
Este fenómeno no es aislado. Expertos en migración cultural señalan que los artistas latinos enfrentan trabas burocráticas sin precedentes, especialmente aquellos que interpretan corridos, música norteña o sierreña. “La narrativa oficial vincula ciertas expresiones musicales con criminalidad o inseguridad, lo que complica aún más la obtención de permisos”, explica la abogada de inmigración María del Sol Hernández, con sede en Texas.
¿Una política deliberada?
Aunque el Departamento de Estado no ha emitido un comunicado oficial que vincule directamente estas decisiones con una política discriminatoria hacia el género regional mexicano, analistas advierten que el patrón creciente de negaciones sugiere una estrategia no declarada de contención cultural.
Desde que Donald Trump volvió a la presidencia en enero de 2025, el discurso antiinmigrante se ha reactivado con fuerza, incluyendo nuevas revisiones a visas de artistas extranjeros. En este contexto, los músicos latinos parecen convertirse en víctimas colaterales de un ambiente político hostil que impacta más allá de la frontera.
Reacción en redes y solidaridad
La indignación no ha tardado en llegar. Hashtags como #SinRegionalNoHayFiesta, #ApoyemosNuestraMúsica y #VisasParaElRegional se han viralizado en redes sociales, mientras fans publican videos de conciertos cancelados y mensajes de apoyo a sus artistas favoritos.
“Es más que música, es identidad, es orgullo”, dice Juana Pérez, una fan de 36 años residente en Chicago que había comprado entradas para un concierto de Peso Pluma. “Cada canción habla de nuestras raíces, de nuestras luchas, de lo que vivimos aquí”.
Impacto económico y cultural
El mercado de la música regional mexicana genera millones de dólares al año en EE.UU., tanto en taquillas como en empleos asociados (producción, logística, turismo). La cancelación de giras no solo representa una pérdida para los artistas, sino también para toda una cadena económica que depende de estos eventos.
José L. Rodríguez, economista cultural, advierte: “Estamos frente a un sabotaje indirecto a una industria que representa la voz y la resistencia de millones de latinos en este país”.
Las recientes restricciones a artistas del regional mexicano no solo afectan a la industria musical, sino que representan una amenaza a la diversidad cultural en Estados Unidos. Mientras el gobierno de Trump defiende la aplicación rigurosa de la ley migratoria, comunidades enteras claman por respeto, inclusión y el derecho a celebrar su herencia cultural.
Equipo BLUJOURNAL