WASHINGTON D.C., junio 2025 — El presidente Donald Trump ha solicitado a las agencias federales de inmigración intensificar las detenciones de inmigrantes indocumentados en ciudades gobernadas por demócratas, insistiendo en que su administración debe cumplir con las promesas de deportación realizadas durante su campaña presidencial de 2024.
El anuncio llega apenas días después de que la Casa Blanca confirmara una “pausa temporal” en las redadas masivas de inmigrantes indocumentados programadas para la semana pasada. Sin embargo, Trump dejó claro hoy lunes que dicha pausa no significa un cambio de rumbo en su política migratoria.
“No vamos a detenernos. Le debemos al pueblo estadounidense acciones firmes. Las ciudades que se niegan a cooperar con las leyes federales serán el foco de atención. Vamos a actuar”, dijo Trump durante un acto oficial en el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
Redadas pospuestas, pero no canceladas
La pausa en las redadas masivas había sido interpretada por algunos sectores como una señal de distensión, sin embargo, fuentes dentro del DHS confirmaron que solo se trató de una “reprogramación logística” y que las operaciones continuarán “en fechas estratégicas”.
Las ciudades más mencionadas por la administración Trump incluyen Nueva York, Chicago, Los Ángeles, San Francisco y Seattle —todas gobernadas por alcaldes demócratas que han reiterado su rechazo a colaborar con las autoridades federales en acciones de deportación.
Campaña con promesas duras
Durante su campaña para regresar a la Casa Blanca, Trump intensificó su retórica antiinmigrante, prometiendo deportaciones masivas, expansión de centros de detención y cero tolerancia con las llamadas “ciudades santuario”.
Ahora, ya en su segundo mandato, ha renovado esa agenda con más fuerza, instando al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) a actuar “sin concesiones”.
“No se trata de política, se trata de proteger a los estadounidenses y hacer cumplir la ley”, añadió el presidente.
Críticas y preocupación en comunidades latinas
Grupos de derechos civiles, organizaciones latinas y líderes comunitarios han denunciado la nueva ofensiva como un intento de criminalizar a comunidades enteras. Varios alcaldes han reiterado su compromiso con la protección de los migrantes.
“Esta administración está utilizando a nuestras comunidades como chivos expiatorios políticos. Las redadas no solo separan familias, también siembran miedo y desconfianza”, declaró Rosa Martínez, portavoz de la organización Unidos Sin Fronteras, con sede en Houston.
Contexto político tenso
Este endurecimiento ocurre en medio de una creciente tensión política entre la administración Trump y los gobiernos locales progresistas, en especial tras la aprobación en mayo de nuevas directrices que limitan los fondos federales a jurisdicciones que no colaboren con ICE.
En paralelo, líderes demócratas en el Congreso han señalado que podrían llevar estas medidas a tribunales federales por considerar que violan derechos constitucionales de debido proceso y protección igualitaria ante la ley.
Equipo BLUJOURNAL