Tampa, Florida – La región de Tampa, conocida por sus playas y su vibrante vida cultural, también es tristemente famosa por ser una de las áreas más vulnerables a los huracanes en los Estados Unidos. Los expertos señalan que esta vulnerabilidad se debe a una combinación de factores geográficos, urbanísticos y climatológicos que la convierten en un objetivo recurrente de tormentas devastadoras.
Terreno bajo y riesgo creciente
Uno de los principales problemas que enfrenta el área de Tampa es su terreno bajo. La ciudad y sus alrededores se han desarrollado en gran parte sobre terrenos pantanosos y planos, lo que la hace más susceptible a inundaciones. “En algunos puntos, el nivel del suelo está apenas a un metro sobre el nivel del mar”, explica el meteorólogo local, Juan González. «Esto significa que un aumento del nivel del mar combinado con las marejadas ciclónicas que traen los huracanes puede inundar rápidamente grandes áreas».
Huracanes recientes agravan la situación
El impacto del huracán Helene, que golpeó la región hace pocos meses, dejó cicatrices visibles. Aunque la tormenta no fue tan poderosa como algunos de los huracanes más devastadores que ha visto la costa del Golfo, sí dejó claro lo frágil que es la infraestructura local. Calles enteras quedaron anegadas y miles de personas se quedaron sin electricidad durante semanas.
Ahora, con la llegada de Milton, un huracán de categoría mayor, la preocupación es palpable. Las autoridades han advertido a los residentes que se preparen para lo peor, y muchos ya han comenzado a evacuar la ciudad.

Un desarrollo urbano sin freno
Otro factor que agrava el problema es el rápido crecimiento urbano de Tampa en las últimas décadas. La expansión ha llevado a la construcción de urbanizaciones, centros comerciales y carreteras en áreas que antes actuaban como barreras naturales para las tormentas. “Los humedales que una vez ayudaron a absorber el impacto de las tormentas han sido reemplazados por concreto y asfalto”, comenta María Fernández, especialista en gestión de riesgos. “Esto no solo aumenta el riesgo de inundaciones, sino que también dificulta la evacuación de los residentes en caso de un desastre”.
Preparativos y advertencias
A medida que se acerca la temporada de huracanes, las autoridades han intensificado las campañas de concientización para asegurar que los residentes estén preparados. Sin embargo, algunos críticos señalan que no se está haciendo lo suficiente para proteger a largo plazo a la región. «Podemos evacuar a la gente ahora, pero sin inversiones en infraestructura y un desarrollo más sostenible, Tampa seguirá siendo extremadamente vulnerable», advierte Fernández.
Conclusión
La combinación de un terreno bajo, una infraestructura frágil y el crecimiento urbano descontrolado hacen que el área de Tampa esté en constante peligro cada vez que un huracán se dirige hacia la costa del Golfo. Mientras las tormentas como Helene y Milton continúen afectando la región, la necesidad de soluciones a largo plazo se vuelve más urgente.
Fuente original de articular en ingles: https://www.wsj.com